Guido Calderón
Desde diciembre los hospedajes españoles deben remitir un total de 28 datos: de la empresa, del establecimiento, del viajero y sus acompañantes; incluyendo pasaporte, dirección de residencia, IBAN, detalles del contrato de alojamiento, teléfono, email y más datos; al Ministerio de Gobierno y mantenerlos por mínimo 3 años, en caso de incumplimiento de esta normativa las multas pueden alcanzar los 30.000 euros.
La plataforma creada por el gobierno, que implica más burocracia y más recaudaciones, colapsó el primer día debido a las más de 300.000 personas que ingresaron para cumplir el decreto y evitar sanciones. El gobierno argumenta que es para incrementar la seguridad, en tanto los hoteleros dicen que puede ser todo lo contrario si esa información es hackeada.
La medida está vigente para coches de alquiler, Booking, Airbnb, agencias de viajes, intermediarias digitales, incluso para aquellas que brindan servicios gratuitos, como los hospedajes del Camino de Santiago. Esta norma sustituye a una ya vigente.
En resumen, nadie puede ingresar a España sin que el gobierno sepa hasta el número de su tarjeta de crédito y fecha de caducidad. Tenebroso. Los británicos han puesto el grito en el cielo y amenazan cambiar de destino a sus 20 mil millones que gastan cada año, pero difícil que otro país soporte sus embriagueces eternas.
En Ecuador, nadie tiene la más peregrina idea de quien utiliza los miles de hospedajes de Airbnb cuyos “anfitriones” han convencido a los 4 últimos gobiernos que adquirir viviendas para rentarlas es un derecho que no debe facturarse y menos comunicar al gobierno el nombre de sus huéspedes, por lo que narcos, terroristas, pandilleros y todo tipo de delincuente, puede deambular por todo el Ecuador amparado por el anonimato que cordialmente brinda el gobierno que supuestamente los combate.
Los hospedajes de renta a largo plazo -por meses- tienen aún menor control y los municipios no legislan y no exigen a los arrendadores que informen quienes son sus arrendatarios, por lo que pandillas completas llegan a una ciudad o pueblo y se apoderan de él sin ninguna dificultad y también con el respectivo anonimato, cortesía de alcaldes y concejales.
Bukele dice: “Cuando un gobierno no combate efectivamente la criminalidad, no es porque no tenga la capacidad de hacerlo, sino porque los cómplices de los criminales son los que están en el gobierno”. Analicemos, cuáles son los partidos políticos que han favorecido y los que han combatido a la delincuencia.
Este contenido ha sido publicado originalmente por EL COMERCIO.