-Una segunda vida que estrena instalaciones a partir de una realidad que puso de moda las nuevas tecnologías, novedosas tendencias en balneaoterapia e innovadores espacios que buscan el bienestar a partir del agua.
El circuito termal gallego que en España la moda de los spas en los establecimientos balneario, el Palacio del Agua de Balneario de Mondariz, vive una segunda vida al estrenar instalaciones a partir de una realidad que prima las nuevas tecnologías, novedosas tendencias en balneaoterapia e innovadores espacios que buscan el bienestar a partir del agua. Una remodelación que ha supuesto casi tres meses de trabajos.
Una nueva zona de camas de hidromasaje, cuellos de cisne, chorros jet con tres alturas, una seta en el centro del circuito, que completa la gran cascada descontracturante, banco lumbar aire-agua, jacuzzis en varios espacios, geiser plantar, así como un espacio destinado a nadar contracorriente que se añade al río central ya existente.
El spa Palacio del Agua dispone de más de 3.000 metros cuadrados divididos en una piscina central interactiva, zonas de descanso, de servicios complementarios como saunas y pediluvio y una piscina zen al aire libre con vistas a la Fuente de Gándara.
Balneario de Mondariz se reinventa así al cumplirse treinta años de la recuperación de la villa termal de Mondariz que culminó con su reapertura el 15 de julio de 1994 del edificio Baranda y Palacios y que finalizaría ya en 2005 con la inauguración del Palacio del Agua. Un desarrollo turístico de salud y bienestar que estos años ha conseguido importantes galardones como el Premio Traveler Conde Nast Internacional, el Premio Nacional a la Excelencia Turístico y que luce hoy el título del Mejor Balneario de España y de Europa, tras recibir el galardón especial en la Fira de Barcelona el pasado mes de diciembre.
Desde su fundación por los hermanos Peinador, que lograron que sus aguas fueran reconocidas de utilidad pública por sus propiedades, es considerado todo un centro pionero y también referente en el sector. Hoy en día cuentan con varias instalaciones que han multiplicado su atractivo como destino turístico y potencial económico gallego. Dispone de un hotel de cuatro estrellas con 194 habitaciones distribuidas en tres edificios históricos comunicados entre sí, campo de golf y espacios de restauración donde además se organizan bodas y diversos eventos. Pero las joyas de Mondariz son sus aguas mineromedicinales y tratamientos que han sabido mantener la tradición histórica, ligada al pasado celta gallego y su estrecha relación con la naturaleza, modernizándose con nuevas instalaciones de última tecnología y diseño. Una clara adaptación del termalismo tradicional a las necesidades del Siglo XXI que ha conseguido que su expertise termal sea ampliamente reconocido.
Los hermanos Peinador son los grandes artífices de lo que hoy es el Balneario de Mondariz y todo su entorno, cuando en 1873 el agua de sus manantiales fue declarada de utilidad pública por el Gobierno de España, convirtiéndose así en la única villa termal española. Un proyecto llevado a cabo por el arquitecto Antonio Palacios, responsable de algunos de los edificios más emblemáticos de Madrid, entre ellos el actual Ayuntamiento de Madrid.
Balneario de Mondariz, 150 años de salud termal
Mondariz cumplió el pasado año 150 años dedicados a la salud termal y como referente europeo en el turismo de salud y con la satisfacción de que su importancia fue tal que son el único caso en el mundo que, por necesidades del establecimiento termal, originó en 1924, un nuevo municipio con autonomía propia y con su nombre Mondariz Balneario como seña,
¿Pero como consiguió ser Balneario de Mondariz conocido, hace dos siglos, en toda Europa y marcar una historia llena de importantes acontecimientos?
La Belle Époque marcó una época en los veraneos de salud de los españoles y europeos más chics que tenían en el Balneario de Mondariz un destino. Mondariz siempre ha sido siempre sinónimo de salud, de encuentro y vacaciones en sus tres siglos de vida. Una villa termal que defiende los intereses de todos los españoles como propios. Haciendo internacional el carácter acogedor de los gallegos. Hablar de Galicia es hablar de la Tierra del Agua: mar, ríos y aguas mineromedicinales que convierten el noroeste español en todo un destino de bienestar que tiene en el termalismo una tradición centenaria que les hace únicos. Mondariz, un balneario que nace a mediados de los siglos XIX y principios del XX es desde siempre el referente europeo del Salutem per Aqua, partir de las propiedades de sus manantiales. El termalismo tradicional de los “aguïstas” de la Belle Époque que trajo a Galicia a personajes como Isaac Peral, John Rockefeller II, Isabel de Borbón, el arzobispo de Westminster, Miguel Primo de Rivera o el sultán Muley Haffid y el infante Augusto de Braganza a cuidar su salud ha dado paso en el siglo XXI a toda una industria turística gallega a partir del culto al cuerpo y la necesidad de buscar la fuente de la eterna . Y es que las aguas mineromedicinales del Balneario de Mondariz por su composición bicarbonatadas, carbogaseosas y ferruginosas son únicas en España a la hora de luchar contra el envejecimiento, tanto a nivel físico como estético. Una realidad recientemente destacada por un estudio realizado por hidrólogos que reconocen la calidad de las aguas termales pontevedresas y que tienen en esta villa termal la referencia del termalismo. Unjas aguas también recomendadas para patologías crónicas (reumatológicas, respiratorias, dermatológicas, digestivas) que tienen un efecto ralentizante del envejecimiento gracias a su efecto antioxidante y antiinflamatorio y ayudan a la reactivación de la capacidad física y psíquica de las personas mayores y mejorando su autoestima).
Mondariz, una agua mineromedicinal con historia
Mondariz, es un agua mineromedicinal con historia a partir de una villa termal que continúa hoy en activo gracias a la recuperación de su actividad y de sus edificios por parte de un grupo de empresarios liderados por el coruñés Javier Solano Rodríguez-Losada, labor reconocida por numerosos premios de un proyecto que ya dura tres siglos de apoyo a la medicina natural, proyecto basado en el poder de las aguas mineromedicinales de la villa termal gallega.
Su casa de baños fue construida en 1880 y a partir de ahí el Gran Hotel que, en 1900, rivalizó con los grandes balnearios de Baden-Baden, en Alemania, y Bath, en Londres. El nivel de los termalístas que acudían cada verano a Mondariz, llegó a convertir el Gran Hotel en un centro social, político y cultural internacional del que dieron cuenta Emilia Pardo Bazán, José Echagaray o Galdós en sus escritos. Fiestas amenizadas por el cuarteto Bacarat, llegado cada año expresamente de París; reuniones politícas entre las que destaca la celebrada, en agosto de 1929, por el jefe del Gobierno español, Miguel Primo de Rivera, y el primer ministro de Portugal, Arthur Ivens Feraz a los que se unió posteriormente el jovencísimo John Rockefeller III, heredero de la mayor fortuna de los Estados Unidos, son algunos de los ejemplos. Una actividad que todavía hoy se mantienen con la visita de personalidades de diferentes sectores que llegan a Mondariz a disfrutar de un lugar de leyenda.
Una época de esplendor que ha dado paso a un centro moderno con un balneario a la carta, un circuito termal basado en la tradición Celta y el Palacio del Agua, un spa de 3.000 metros cuadrados de piscina interactiva y un campo de golf de 18 hoyos, así como una zona dedicada a los más pequeños, Mondariz Kids, para que ellos disfruten mientras sus padres descansa. Una gestión propia por parte de los propietarios que desarrollan varias líneas de negocio: hostelería, termal y golf.