Rebecca Black visita la ciudad de los Emiratos Árabes Unidos para comprobar si se puede explorar este destino famoso por su extravagancia sin gastar una fortuna.
Al otro lado del arroyo, frente a las brillantes luces y los rascacielos de Dubai, me siento como si estuviera en otro mundo, en una casa tranquila y tradicional de estilo emiratí.
La gente viene de todas partes del mundo para escalar el edificio más alto del mundo, ver el anillo de oro más pesado o intentar tener en sus manos la barra de chocolate viral de Dubai que se hizo famosa en TikTok.
Pero hay otra cara de Dubai, rica en tradiciones emiratíes y, me atrevo a decirlo, incluso accesible para personas con un presupuesto limitado.
Es un shock para el sistema aterrizar en un lugar con una temperatura de 38 °C y una ciudad que, incluso a las 2 de la mañana, está llena de actividad y bullicio. Un viaje a través del arroyo hasta la zona histórica de Al Seef me transporta a una agradable tranquilidad.
Nos reciben en el Al Seef Heritage Hotel by Hilton con un vaso fresco de jugo de granada antes de que un carrito de golf nos lleve rápidamente a nuestras habitaciones en un edificio bajo y de techo plano, completo con una terraza que ofrece impresionantes vistas de las luces y el horizonte de la ciudad al otro lado del agua.
Sabores, vistas y sonidos del antiguo Dubái
Nunca me negaré a seguir los pasos de Beyoncé. A la mañana siguiente, la seguí y visité el Centro para el Entendimiento Cultural Sheikh Mohammed bin Rashid Al Maktoum (SMCCU), en una de las zonas más antiguas de Dubái, para disfrutar de un festín de comida y cultura.
Durante un brunch que incluye biryani de pollo, arroz, pan y pequeñas donas redondas cubiertas con almíbar de dátiles, la guía Noora Al Marzooqi explica la hospitalidad tradicional en Dubai.
Noora describe la distribución de la antigua casa y cómo se usaban las habitaciones para vivir y recibir invitados. Revela que el hecho de que le sirvan una pequeña taza de café demuestra afecto por los invitados, lo que implica que los anfitriones quieren que se quede con ellos por más tiempo.
No hay preguntas fuera de lugar, desde la ropa hasta las tradiciones y los sombreros, mientras ella explica pacientemente cómo las prendas locales protegen a los emiratíes del calor abrasador mientras trabajan al aire libre.
Explorando los zocos
La red de zocos más antigua de Dubái, en la zona de Al Khor, es otra forma evocadora de sentir el alma de la ciudad. En las estrechas calles veo vendedores que venden de todo, desde especias y oro hasta flores, ropa, perfumes y una gran variedad de alimentos.
Ketki, de Frying Pan Adventures, describe las zonas como las arterias de la ciudad y nos lleva a varios de los establecimientos de comida más populares, como la panadería Al Shaiba, donde, a pesar del calor, se hornea pan afgano día y noche, uno de los tentempiés más sabrosos y económicos de la ciudad. Todavía caliente del horno, la miel gotea por mis dedos mientras muerdo el pan con queso y miel y bebo un poco de té dulce y caliente.
Parte del recorrido incluye un breve traslado en barco a través del arroyo hasta otra sección de zocos, donde se evidencia la influencia hindú con colores brillantes y flores frescas.
Nuestro recorrido concluye en el restaurante Al Khayma Heritage, donde los propietarios se enorgullecen de la decoración tradicional y los platos locales favoritos, como un delicioso biryani de cordero servido en una mesa baja.
Una de las experiencias más mágicas de mi viaje es un Heritage Safari en un Land Rover clásico. La empresa, Platinum Heritage, se encarga de que vayamos bien preparados, nos envolvemos la cabeza con pañuelos para protegernos del sol mientras nos adentramos en la arena hasta donde alcanza la vista en Land Rover clásicos.
El guía de conservación Amjad Mehmood claramente tiene pasión por el paisaje y la vida silvestre, explica los esfuerzos de conservación y disminuye la velocidad para permitirnos ver los órix y las pequeñas y esquivas lagartijas de arena que corretean por las dunas.
Cuando el sol comienza a ponerse, llegamos para ver una exhibición de halcones antes de dirigirnos a un campamento bellamente acondicionado para disfrutar de un festín bajo las estrellas. Después de un paseo en camello, disfrutamos de un espectáculo musical y nos tumbamos en alfombras y sofás bajos para disfrutar de una sesión guiada de observación de estrellas con pipas de agua.
Lujo en la ciudad moderna
Es imposible visitar Dubái y no maravillarse con los aspectos que han hecho que la ciudad sea mundialmente famosa. Junto al Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo, se encuentra The Frame, un enorme marco dorado que se extiende hasta el cielo. Tiene la ventaja adicional de contar con una exposición que muestra la rápida transformación de la ciudad desde mediados del siglo XX hasta la actualidad. Un ascensor sube por la estructura de 48 pisos en solo 75 segundos para disfrutar de vistas panorámicas de la ciudad.
Los recorridos en yate desde Dubai Marina ofrecen otra vista de la ciudad, pasando por imponentes rascacielos en distintas etapas de construcción.
Pero ningún viaje a Dubai está completo sin visitar la famosa Palm Jumeirah, donde se encuentran algunos de los hoteles más lujosos del mundo, y el hotel de siete estrellas Burj Al Arab, que se encuentra cerca.
Sí, puedes ahorrar y derrochar en una visita extravagante, pero también puedes tener una experiencia auténtica sin gastar una fortuna.
Publicado en The Portugal New.
