China ha implementado una nueva política de reembolso inmediato del Impuesto al Valor Añadido (IVA) para turistas extranjeros, transformando la experiencia de compra en el país. Desde abril de 2025, los visitantes pueden obtener la devolución del IVA directamente en el punto de venta, sin necesidad de esperar hasta su salida del país. Esta medida ha generado un notable aumento en el turismo de compras, especialmente en ciudades como Shanghái, que ha experimentado un incremento del 38% en las reservas en comparación con el año anterior.
La política permite a los turistas recibir reembolsos de hasta el 11% del valor de sus compras en tiendas autorizadas que exhiben el distintivo «Buy and Refund». Para calificar, se requiere una compra mínima de 200 yuanes (aproximadamente 27 dólares) en una sola tienda en el mismo día. El límite máximo para reembolsos en efectivo se ha duplicado a 20,000 yuanes (alrededor de 2,745 dólares).
El proceso es sencillo: los turistas presentan su pasaporte y la factura de compra en el mostrador de reembolsos de la tienda, donde reciben el reembolso en efectivo o mediante transferencia electrónica. Al salir del país, deben presentar el formulario de reembolso original a los funcionarios de aduanas para su validación.
Esta iniciativa, que comenzó como un programa piloto en ciudades como Shanghái, Beijing y Guangzhou, se ha expandido a nivel nacional debido a su éxito. En Shanghái, por ejemplo, 284 de las 587 tiendas libres de impuestos ya ofrecen el reembolso inmediato del IVA.
Los turistas han recibido positivamente esta política. Un visitante español comentó: «Es muy conveniente. Muestras el pasaporte y te hacen el descuento en el momento». Otro turista saudí expresó: «Es muy agradable. Te hace tan feliz que quieres comprar más».
Además del reembolso inmediato del IVA, China ha tomado otras medidas para atraer a los turistas, como la flexibilización de las políticas de visado y la mejora de la accesibilidad a los pagos electrónicos. Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia para estimular el consumo interno y fortalecer la economía del país.
Con estas políticas, China se posiciona como un destino atractivo para los turistas interesados en las compras, ofreciendo una experiencia más fluida y beneficiosa. Se espera que estas medidas continúen impulsando el crecimiento del turismo y el consumo en el país.
